miércoles, junio 19, 2024

Leyendas olímpicas: Mo Farah

Hay infancias difíciles, y la de Mo Farah. Nacido en Somalia, en plena guerra civil, su padre murió por una bala perdida cuando el niño tenía cuatro años. Su madre, que tenía otros siete hijos, lo mandó con familiares a Djibouti y desde ahí lo enviaron a Gran Bretaña con documentos falsos. El nombre era el de otro niño: Mohammed Farah. Tenía 9 años. No llegó con los parientes lejanos que irían a recibirlo. En cambio, fue llevado a casa de una mujer, donde trabajó de sirviente desde una edad muy pequeña. Recordaba con nostalgia los días en Somalilandia cuando jugaba futbol con una pelota hecha de calcetines viejos envueltos en una bolsa de plástico.

Iba poco a la escuela, pero aun así, el maestro de educación física quedó impresionado por su capacidad en la carrera. El muchachito, en primero de secundaria, se atrevió a decirle al coach acerca de su situación. El maestro avisó a la escuela y a los servicios sociales, Mo fue rescatado y enviado con los parientes lejanos, que lo trataron bien. 

Inició a entrenar en serio, y destacó a nivel nacional. Lo suficiente como, ayudado por su mentor de la escuela, Alan Watkinson, para obtener la nacionalidad británica a los 17 años. Fue sexto lugar en los 5 mil metros planos en el Mundial de Osaka 2007 y pasó a vivir con unos corredores kenianos. Estos tenían una rutina: entrenar, comer, dormir, entrenar, comer, dormir. Para Mo, esto era demasiado: entrenaba, salía con amigos, jugaba videojuegos. En los olímpicos de Pekín 2008 terminó en el lugar 17 y no pasó a la final. Entonces decidió ir a Kenya con sus cuates y hacer exactamente lo mismo que ellos: entrenar, comer, dormir, entrenar.

Para los mundiales de Daegu, en 2011, ya era una corredor muy difícil de vencer: obtuvo oro en los 5 mil y plata en los 10 mil.  Estaban por venir los juegos de Londres, donde competiría como local. Decidió entrenarse con el famoso entrenador cubano-americano Alberto Salazar. 

En Londres 2012, se llevó el oro en los 10 mil metros, al parar el cronómetro en 27:30:42. Esa victoria le quitó la presión y corrió los 5 mil con mayor tranquilidad, para coronarse campeón olímpico en la distancia, con 13:41:66. Empezaba una era de dominio total.

En los Mundiales de Moscú 2013 repitió el doble-doble: campeón en los 5 y 10 mil metros. En 2015, en Pekín, repitió la hazaña. En el entretiempo había roto el récord europeo de los 1500 metros planos y corrido el medio maratón en menos de una hora. Era el superfavorito para Río 2016.

En Brasil no decepcionó.  Se llevó el oro en los 5 mil metros y, en la final de los 10 mil, fue tropezado por el estadunidense Gallen Rupp, se levantó, alcanzó al grupo y ganó en un cierre de alarido. Fue el primero en conseguir dos dobles-dobles olímpicos consecutivos en esas distancias, desde los inmortales Emil Zatopek en 1948-52 y Lasse Virén en 1972-76. 

2017 sería un año de claroscuros. Por un lado, se convirtió en tricampeón mundial consecutivo en los 10 mil metros, en la justa londinense. No pudo convertirse en tetracampeón en los 5 mil, porque obtuvo plata. También fue nombrado caballero por la corona británica. Pero por el otro lado, descubrieron una trama de dopaje en el grupo entrenado por Alberto Salazar. Farah siempre salió limpio de todas las pruebas antidoping; otros, no. Salazar fue suspendido por cuatro años.

Mo no intentó emular a Zatopek de 1952, quien también ganó el maratón olímpico en esos juegos, pero se decidió a intentar ganar la prueba para Tokio 2020. Pasó de la pista a la ruta. Lo hizo bien, llegando a ganar el maratón de Chicago de 2018 con un tiempo excelente de 2:05:11. Pero llegaron las lesiones, terminaba los maratones en buenos lugares, pero no se sentía capaz de llegar al podio olímpico.

En 2022, reveló ante la BBC que había sido víctima de tráfico de personas. Su nombre de nacimiento era Hussein Abdi Kahin, y había tenido miedo durante muchos años que, si se sabía, le hubieran despojado de su nacionalidad británica. Ahora estaba seguro de que no sería así, y le puso Hussein a uno de sus hijos. Meses después, anunció su retiro.


No hay comentarios.: