Los villanos son indispensables en el cine, y también son abundantes. Si uno ha visto mil filmes, ha conocido a más de mil villanos. Pero hay unos inolvidables, casi siempre porque son particularmente odiosos. Aquí una lista de los que considero los mejores, por razones varias. Son mis villanos fílmicos favoritos.
Harry Powell, The Night of the Hunter (1955)
Harry Powell, interpretado por Robert Mitchum, es el villano más completo que me ha tocado ver. Es un asesino despiadado, que se ceba en las personas débiles. Es un misógino y abusador de niños. Pero además es un falsario, que utiliza la moral y la hipocresía para dar otra imagen de sí. Si tiene un Dios, es el dios de los cínicos. A diferencia de otros, que utilizan las normas morales para hacer el mal (como la enfermera Ratchet, en One Flew Over the Cuckoo's Nest (1975) o que son completamente amorales, como Anton Chigurh, de No Country for Old Men (2007), el Reverendo Harry Powell sí conoce la diferencia entre el bien y el mal. Y elige el mal. Y durante toda la película el espectador no hace más que odiarlo.
Coronel Hans Landa, Inglorious Basterds (2009)
Hans Landa, genialmente interpretado por Christopher Waltz, es el caso más acabado del villano que amas odiar. Astuto, cultivado, cínico, provisto de un fino sadismo, arrogante, pero sobre todo ambicioso y oportunista. Es el político que es cortés porque está esperando el momento para atrapar su presa, el militar capaz de matar a sangre fría. El hombre que no tiene más lealtad que con sus intereses. Y todo lo hace con una vena sarcástica que termina por crear un personaje inolvidable.
Phyllis Dietrichson, Double Indemnity (1944)
En este film, uno de los más logrados del género del film-noir, Barbara Stanwyck es el epítome de la femme fatale. Una mujer fría y manipuladora, que utiliza el arte de la seducción para sus propios fines, y que no se toca el corazón para matar, traicionar y deshacer a todo el que se ponga en su camino. La película tiene la ventaja de que, desde el principio uno sabe quienes son los asesinos, y eso permite ir estudiando el terrible personaje.
El Jaibo, Los Olvidados (1950)
Hay distintas maneras con las que se responde a la marginación. El Jaibo, en la interpretación legendaria de Roberto Cobo, responde con violencia, traición y una dosis de sadismo, que se ensaña en los más débiles. Es un auténtico hijo de la chingada, aunque en el fondo sea débil, él también.
Hans Beckert, M (1931)
Hay distintos tipos de sicópatas en el cine, todos terribles. Pero hay unos que están tan pirados que no s dan cuenta. como Jack Torrance, en The Shining (1980) o que entienden su condición con cinismo, como el excelente Guasón en The Dark Night (2008), pero Hans Beckert, en la interpretación de Peter Lorre, la sufre. Es algo que puede más que él, un monstruo interno. Eso lo hace humano y, al mismo tiempo, doblemente horroroso.
Terminator, The Terminator (1984)
Por una parte, Brick Top, actuado por Alan Ford es de los pequeños jefes del crimen organizado más creíbles; por la otra, es cruel, tramposo, mal hablado, iracundo y no exento de torpezas. Eso lo hace un villano particularmente aborrecible. No importa que sea un personaje menor. Esa misma película tiene otro malo difícil de olvidar: Boris The Blade, que es prácticamente inmorible.
Termino, por ahora, con una villana de caricatura. Está en la lista por mala, por fea, y porque es de muy mal gusto usar pieles de perritos dizque para implantar una moda. De niño odié a esa cacatúa.
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